The Greatest Guide To Gnosis y el Significado de los Sueños

The Greatest Guide To Gnosis y el Significado de los Sueños

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Antes de acostarnos para el descanso de los afanes y fatigas del diario vivir, conviene poner la debida atención al estado en que nos encontramos. Los devotos que debido a las circunstancias llevan vida sedentaria, realmente nada pierden y mucho ganan, si antes de acostarse realizan un paseo corto a paso vivo y al aire fresco.

Si es un río: estos estados internos son causados por la Energía Sexual descontrolada que busca entrar en Involución.

Soñar un camino puede representar ese trabajo a realizar sobre nosotros mismos. Si el camino es accidentado, con piedras, malo, nos indica que hay que revisar el trabajo que estamos haciendo con el propósito de andar en él. Quizás no estemos realizando correctamente el trabajo de la transformación de nosotros mismos, a lo mejor no estamos meditando en forma correcta, posiblemente estemos mezclando enseñanzas y el resultado no sea el que esperamos.

Cada arcano nos entrega una sabiduría muy importante que debemos desarrollar o trascender. Este arcano veintidós nos representa la verdad, la corona de la vida que se nos menciona en el Apocalipsis como símbolo de la culminación del trabajo: “Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida”. Al ver este número en los sueños nos expresa éxito en lo que nos propongamos, que saldrán bien las cosas, que hay poder, fuerza y buena suerte. Se le llama el regreso debido a que es el camino que debemos seguir, hemos salido de las entrañas de ese fuego divino y nuestro deber es regresar a la misma divinidad, a través de una transformación inside profunda.

Más adelante afirma el Maestro que: “El infra-consciente es un remanente tenebroso de un remoto pasado. El sabio masoquista es el pervertido sexual que puede asesinar a la mujer por puro placer sexual.

En la vida todos tenemos la misión de regresar a nuestro origen: la divinidad. La fórmula para hacerlo es car realizándonos mediante el desarrollo armonioso de todas las facultades internas.

En algunas muy raras ocasiones podríamos tener la dicha de estar con ellos cuando despertamos en el mundo astral conscientemente; lamentablemente, acostumbrados a lo superficial, a lo material, and many others., solemos desperdiciar esas magnificas oportunidades haciendo preguntas muy tontas.

Puede desencadenar actos violentos delictivos y hasta criminales mientras se encuentre sumergido en el sueño y no haya vuelto a la vigilia plenamente en distintas variantes de sonambulismo. Como resultado de la infraconsciencia se puede confundir la realidad con el sueño, dando origen a falsas apreciaciones que pueden inducir a errores o hasta actos delictivos.

Resulta muy interesante apreciar como las distintas dimensiones learn this here now se penetran y compenetran sin confundirse. Estamos en el mundo fileísico o tridimensional y en un mundo paralelo exceptional a este mundo físico se encuentra el mundo critical o cuarta dimensión. Más allá del mundo essential se localiza el mundo de los sueños o quinta dimensión. En esta misma quinta dimensión, pero en una nota vibratoria más elevada a la del mundo astral encontramos el mundo psychological.

Para utilizar los números en tu vida diaria y conectar con las fuerzas espirituales, puedes seguir estos pasos:

Alguien que conoces: la relación con una parte de ti mismo se purifica, dependiendo de lo que esa persona representa.

El que ilumine una pareja tomada de la mano nos indica que, para que se logre ese éxito que anhelamos, es menester aprender a combinar sabiamente las fuerzas magnéticas femeninas con las masculinas, éste es un arte grandioso que hay que aprender a manifestar en nuestra vida.

Si ves un objeto de madera: tendrás que añadir el simbolismo del objeto en cuestión. Por ejemplo, ver una vieja mesa de comedor de madera significa que tu forma habitual de Transformar las Impresiones es caduca.

“La vida no es más que una sombra en marcha; un mal actor que se pavonea y se agita una hora en el escenario y después no vuelve a ser oído.” William Shakespeare.